Una semana después de haber logrado la unificación en el Senado, el peronismo K creó un bloque de 121 diputados que le permitirá ser la primera minoría en el recinto. En segundo lugar quedará Cambiemos con un interbloque que contendrá a cerca de 119 legisladores.
Aníbal Fernández participó de la reunión junto a todos los diputados que estarán en el nuevo bloque de unidad que une las diferentes vertientes que integran el Frente de Todos. Un sector importante, integrado por representantes de los gobernadores del PJ y espacios políticos más pequeños, pretendía conformar un interbloque. Encontraban en ese diseño una forma de mantener cierta autonomía sosteniendo bloques propios. Identidades distintas pero alineadas al proyecto político nacional.
El líder del Frente Renovador, Sergio Massa, será el presidente de la Cámara de Diputados, mientras que el hijo de la vicepresidenta electa ocupará la presidencia del bloque unificado del Frente de Todos, un lugar que parecía ser del santafesino Agustín Rossi, pero que en el rearmado del nuevo tablero –que incluye Gabinete, organismos y Congreso– terminó cambiando de dueño.
El “Chivo”, como se lo conoce en el ámbito político, será el nuevo ministro de Defensa de la Nación, cargo que ocupó en el último mandato de Cristina Kirchner.
Massa y Máximo Kirchner funcionarán como contrapeso entre el peronismo y el kirchnerismo. Ambos provienen de diferentes vertientes y representan miradas distintas que conviven en un mismo territorio político.
Máximo Kirchner llega a ocupar la banca de presidente de bloque como la síntesis de todos los sectores y la representación del poder real que tiene su madre dentro del nuevo gobierno. Máximo es Cristina. Representan lo mismo aunque, quienes lo conocen, marcan algunas diferencias en sus formas de negociar y de liderar. En un cargo de mayor exposición las cualidades del líder de La Cámpora quedarán a la vista más rápidamente.