El gobierno de Axel Kicillof pagó este martes poco más de U$S 24 millones en intereses de un bono emitido por María Eugenia Vidal en 2017. Se trata del segundo desembolso de deuda en lo que va del año.
Los funcionarios del gobierno habían adelantado el pasado 7 de febrero a la Bolsa la decisión de ejecutar el pago. Se del vencimiento de intereses del BP23 por un total de U$S 24,3 millones de un título de deuda emitido por la ex gobernadora en febrero de 2017, y corresponde al sexto servicio del título.
Es el segundo pago que la administración Kicillof afronta este año, luego de que a principios de mes saldara una cuota del BP21 por U$S 250 millones, tras los infructuosos intentos por postergar el pago hasta mayo. En el caso de este nuevo pago, el vencimiento no presentaba dificultades para el gobierno debido a su monto.
Según precisó el gobierno de Axel Kicillof a través de un comunicado remitido a la Bolsa, el cálculo de la renta a abonar se realizó sobre la base de una tasa fija anual de 6,5%, para el período que comprende desde el 15 de agosto de 2019 hasta el 15 de febrero de 2020.
El pago se realizó el mismo día que el gobierno cerró un tramo de la negociación salarial con los gremios estatales y dispuso el pago de un aumento de $ 4.000 vía decreto. Aunque se sabe que Kicillof cuenta con un fuerte apoyo de los principales gremios de la provincia, sindicatos menores como el que representa a los médicos de los hospitales públicos.
“Kicillof generó expectativas, pero empezó metiendo un impuestazo a los sectores medios y a los trabajadores, reconociendo y pagando la deuda usuraria de Scioli y Vidal sin auditoría alguna”, dijo Guillermo Pacagnini, secretario General de Cicop y agregó que “cerrar unilateralmente la paritaria estatal, para terminar metiendo el mismo miserable bono en cuotas que le dio el gobierno nacional es una estafa. Está más que claro que nos ajustan para pagarle al FMI y a los bonistas. Este gobierno ya eligió: los bancos están primero”.
Con este desembolso en dólares, Kicillof hace frente a un nuevo pago de los que tiene en su cronograma para el 2020 que en total ascienden a U$S 1.928 millones. Mientras negociaba con los acreedores, el gobernador había dicho que de los vencimientos de deuda previstos para 2020, el 67% (unos U$S 2.274 millones) corresponde a deuda contraída entre 2016 y 2019, durante la gestión de Vidal.
Para los años siguientes, detalló que la deuda generada en los últimos cuatro años representa el 62% de los vencimientos de 2021 (por U$S 1.596 millones), el 90% de los vencimientos de 2022 (por U$S 1.853 millones) y el 92% de los vencimiento de 2023 (por U$S 2.023 millones).
A principios de febrero, el gobierno puso fin a un primer tramo complejo en lo que refiere a la negociación de la deuda de la provincia. Luego de varios días de esperar de los bonistas la aceptación de la postergación en los pagos de capital, tuvo que hacer frente al vencimiento de U$S 250 millones con fondos propios de la provincia de Buenos Aires.
Para poder efectuar el pago, el Gobernador debió recurrir a una colocación de Letras del Tesoro en el mercado doméstico. De una licitación de $ 10.000 millones, consiguió colocar $ 9.300 millones gracias a varios intendentes propios que accedieron a comprar esas Letras. Esa colocación de deuda fue clave para que frente al pago de U$S 250 millones (unos $ 15.000 millones).