“Lo mejor que nos puede pasar es ir en una lista de unidad”, expresó el presidente del Partido Justicialista (PJ), José Luis Gioja, al tomar la palabra en el Congreso del PJ que se reunió por primera vez bajo el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner.
La tónica del encuentro estuvo marcada por el contraste entre el año pasado, cuando, en el mismo escenario, el partido intentaba sortear la intervención judicial, y la actualidad en la que recuperó la presidencia de la Nación.
“Saludamos a los compañeros de Córdoba y Salta”, destacó el presidente del Congreso del PJ, el formoseño, Gildo Insfrán, acentuando la amalgama que el peronismo consiguió en el último año. Los cordobeses en su totalidad no asistían a un Congreso desde hace casi diez años, mientras que los salteños pasaron por el impasse que provocó el intento fallido de candidatura presidencial del ex gobernador Juan Manuel Urtubey.
“Ahora volvemos a ser muchos”, destacó Insfrán apenas dio por comenzado el Congreso promediando el mediodía. Apuntaba al entusiasmo que mostraban los congresales cordobeses y salteños que participaban con estruendo del Congreso partidario después de años de desencuentros. El fortalecimiento interno del peronismo se transformó en la punta de lanza de los dirigentes cada vez que hablaron tomaron la palabra en el microestadio de Ferro. Más de 562 congresales de todas las provincias y la ciudad de Buenos Aires apuntalaron la idea de un peronismo fuerte ante los arrebatos que el neoliberalismo le asestó al país durante la presidencia de Macri.
“El PJ comparte la postura del presidente de todos, Alberto Fernández, cuando afirma que los recursos para pagar la deuda no serán producto del hambre y la destrucción de los sueños de las familias argentinas”, apuntaron los dirigentes en el documento que se aprobó por unanimidad. Entre los participantes había cierta expectativa por la posible presencia de Fernández, a pesar de que entre los jefes peronistas ya sabían de antemano que eso no iba a suceder. Fernández propone ser el presidente del Frente de Todos, una conjunción de partidos progresistas, para sumar más sectores en una coalición que tenga al PJ como columna vertebral. Por ello envió al jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y al ministro de Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, los articuladores entre la presidencia y el PJ y sus aliados.
“Apoyamos y festejamos la idea de saber qué pasó. Quiénes permitieron y quiénes se beneficiaron con las prácticas de endeudamiento y fuga de capitales implementadas. No podemos hacernos los distraídos ante lo ocurrido, para así lograr consolidar este llamado a un Nuevo Nunca Más”, destacó el justicialismo en el documento final. Además plantearon la posición sobre la persecusión judicial sufrida por algunos dirigentes. “Al mismo tiempo planteamos la preocupación por las detenciones arbitrarias que se han dado en la Argentina”, escribieron.
Después de aprobar la memoria y balance del año, se aprobó la intervención de la regional del PJ correntino y luego se designó a la Junta Electoral. A continuación Gioja anunció que se convocaba a elecciones internas para el 3 de mayo. “Nos costó mucho llegar a donde llegamos. Queremos ser la bandera de la unidad del progresismo y el justicialismo”, afirmó exponiendo la idea central que impulsa Fernández para el Frente de Todos.
La reunión contó con casi todos los sectores del peronismo. Bien temprano comenzaron a llegar para acreditarse los congresales. Los que hicieron más ruido fueron los sindicalistas, que arribaron en masa. El secretario general de la CGT, Héctor Daer, llegó acompañado de Andrés Rodríguez de UPCN, Antonio Caló, secretario general de la UOM; Omar Viviani, líder del gremio de los peones de Taxis; y Victor Santa María, titular del SUTERH. También se acercaron los integrantes de los partidos que componen el FdT como el diputado, Carlos Heller, y el titular de la Acumar, Martín Sabatella. El líder de la Central de Trabajadores de Argentina, Hugo Yasky, y Francisco Barba Gutiérrez se sumaron más tarde.
Sobre el final se abrió la lista de oradores y el presidente del PJ bonaerense, Gustavo Menéndez, elogió la labor de la conducción de Gioja. “El Flaco le puso el pecho a un momento muy difícil del partido y lo sacó adelante. Sin coraje no hay gloria y se vienen dos años difíciles”, apuntó anticipando la tarea de defender al gobierno en lo inmediato. Cada uno de los que tomó la palabra apuntó a la necesidad de acordar una lista de unidad. Gioja aparece como el candidato natural, mientras que el gobernador chaqueño, Jorge Capitanich, ya expuso su voluntad para encabezar el PJ, aunque aclaró que no buscaba confrontaciones.