“Atrás de una protesta siempre hay que escuchar. La protesta estaba encabezada por familiares y personal retirado o exonerado de la policía, lo que sirve de apalancamiento para el resto de la fuerza”, precisó Berni.
Ayer, efectivos retirados de la Policía bonaerense y agentes en actividad realizaron una protesta en el centro de la ciudad de La Plata y en distintos puntos del interior provincial en reclamo de una mejora salarial y en demanda de insumos para prevenir el contagio del coronavirus.
Los policías, junto a sus familiares, cortaron las calles 7 y 50, en el centro de la capital provincial, en tanto algunos patrulleros que se acercaron a la zona hicieron sonar sus sirenas en apoyo a la protesta. Las manifestaciones se produjeron también frente a la residencia oficial que habita el gobernador Kicillof.
“La seguridad del gobernador nunca estuvo amenazada”, sostuvo Berni, y aclaró que no hubo incidentes con el personal apostado en la vivienda.
Carlos Bianco indicó que la recomposición salarial se produce en medio de los anuncios por la presentación del plan integral de seguridad de la provincia de Buenos Aires, que se oficializará esta semana. El jefe de Gabinete informó que el programa representará 40 mil millones de pesos: 10 mil millones para los patrulleros y tecnología, 20 mil para las nuevas unidades penitenciarias y otros 10 mil para la inversión corriente en la incorporación de los efectivos.
Los funcionarios indicaron que existen, además, puntos a corregir como la “recomposición de la carrera policial”, ya que hay un atraso en los ascensos de oficiales. Además, se atenderá la sanidad policial de los efectivos y sus familias, con sus centros propios de atención y el acceso a la vivienda, ya que “muchas veces tienen que trasladarse más de 200 km de donde viven a donde trabajan”.
“Queremos valorar su profesión y el compromiso que han realizado en la pandemia”, manifestó Berni.