La inflación saltó 5,9 por ciento en septiembre y acumula una suba del 37,7 por ciento en lo que va del año, según informó este miércoles el Indec.
Se trata de la mayor alza del 2019 que en el Gobierno atribuyeron al resultado de las elecciones primarias y la posterior devaluación del peso.
“Tras conocerse los resultados de las PASO hubo una fuerte corrección a la baja de los precios de los activos argentinos y una suba del tipo de cambio que interrumpió transitoriamente el proceso de baja de la inflación que veníamos transitando desde abril pasado”, afirmaron.
Por su parte, la inflación interanual se situó en el 53,5%, algo por debajo del pico del 56,8% registrado en mayo de este año, el récord hasta ahora desde la salida de la convertibilidad.
En esta oportunidad, los rubros más afectados fueron “prendas de vestir y calzado” (9,5%), “salud” (8,3%), “bienes y servicios varios” (8,2%), “recreación y cultura” (7,6%), “equipamiento y mantenimiento del hogar” (7,4%) y “comunicación” (6,7%). A nivel general, los bienes se incrementaron un 7,1%, mientras que los servicios lo hicieron en un 3,6%.
Esta vez, la inflación núcleo -que no contempla los precios regulados ni los estacionales y representa lo que sucede con el 70% de los precios de la economía- se ubicó en 6,4% y mostró la tendencia subyacente de los precios. En tanto, los precios estacionales subieron un 8,5%.
La diferencia es lógica habida cuenta de que el gobierno congeló tarifas y combustibles luego del salto del dólar posterior a las PASO, con una pequeña concesión del 4% que estuvo lejos de reacomodar los atrasos. Por eso los precios regulados subieron solo 3,4%.
También se notó la contención de los precios de los alimentos de la canasta básica con la baja del IVA. Así y todo, los alimentos subieron 5,7% en el mes y llegaron al 56,9% de inflación interanual. En los primeros ocho meses del año, subieron 40,9%.
A pesar de la espiralización de precios, desde el Banco Central prometieron que en octubre se retomara el sendero decreciente. “Las medidas implementadas permitieron estabilizar el tipo de cambio, y que la inflación retome su sendero decreciente a partir de octubre. En octubre, los indicadores de alta frecuencia muestran que la inflación será significativamente menor a la de septiembre, reflejando que la inflación retomó el proceso de desinflación”, agregaron.